Lo que estás a punto de leer es una guía práctica para empezar ya a trabajar con tus alumnado utilizando la metodología del aprendizaje cooperativo. Una guía en la que básicamente explico lo que me funciona a mí en una metodología que llevo trabajando desde el curso 2014-2015. No pienso meter teoría innecesaria, citas profundas de autores ni meterte el vídeo de los gansos. Si quieres explicaciones más sesudas y técnicas, hay por ahí mil artículos y libros que satisfarán tu necesidad. Aquí vamos a intentar ser lo más breves posibles para ir al lío en cuanto antes.

Qué no es aprendizaje cooperativo

Si estás leyendo esto, es probable que tengas interés por aplicar el aprendizaje cooperativo en tus clases. Puede que hayas escuchado hablar de esta metodología en algún curso, que algún compañero tuyo la utilice, o que me hayas visto a mí pontificando en Twitter. A menudo me llegan menciones o dm de personas que me piden que les explique ”de qué va esto” porque necesitan un cambio en sus clases. Bien, antes de nada, creo que es necesario que te mentalices de lo que NO es el aprendizaje cooperativo:

  • No es una panacea, ni una metodología mágica. Si tus clases van mal ahora, no tienen por qué mejorar si trabajas en AC. Puede que sí, puede que no. No esperes resultados milagrosos de un día para otro, sobre todo si nunca has utilizado una metodología distinta a la mal llamada clase magistral. Vas a encontrarte con dificultades y vas a tener que aprender a gestionarlas.
  • No es un trabajo en grupo que mandas para casa y en el que luego pones una nota grupal. El AC se hace en clase y se evalúa de forma individual.
  • No es una metodología cómoda en la que podrás estar sentado en tu mesa mientras los alumnos/as trabajan de forma autónoma Si haces esto y lo haces bien, te aseguro que vas a pasarte toda la clase levantado, moviéndote entre los grupos base. Solo así podrás comprobar quién está trabajando y quién no (¿recuerdas lo que hemos dicho de evaluar de forma individual?), resolver los conflictos y las dudas que vayan surgiendo. Yo salgo agotada de mis clases en AC.
  • No es una metodología que te vaya a permitir improvisar, llegar a clase únicamente con el libro e ir rodando sobre la marcha. No, al menos, al principio. Arrancar en esta metodología te va a exigir un tiempo previo de preparación de fichas, actividades graduadas por niveles, etc.

Qué sí es aprendizaje cooperativo

  • Es una metodología que merece mucho la pena y que a largo plazo puede beneficiar mucho a esos grupos que se adaptan mal a la metodología tradicional. Precisamente mis mejores resultados han sido con estos grupos.
  • Es una metodología que te aportará nuevas herramientas para controlar el ruido de clase, para atender a la diversidad, para evaluar de una forma más rápida y cómoda el trabajo diario.
  • Es una metodología que implicará al alumnado en la gestión de su propia clase, desde el ruido al orden, obligándoles a desarrollar su asertividad para enfrentarse a los conflictos que van a surgir, con toda seguridad, dentro de sus grupos. Si en el trabajo en grupo tradicional los mandamos a juntarse en casa de alguien, desentendiéndonos de todo lo que pueda ocurrir, en el AC los estamos observando y estamos obligados a intervenir para aconsejar la mejor forma de resolver los problemas. Una vez un alumno de 1º ESO, en su carta de despedida a final de curso, me escribió: ”nos has enseñado realmente a trabajar en grupo, cosa que nadie había hecho”.

¿Sigues queriendo continuar con esto? Entonces, nos vemos en el siguiente post.

By Elena

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